El verano es su momento, sin duda, y a nadie que le guste este fruto se le escapa que es un placer coger una frambuesa directamente de la planta cuando la vemos con ese color rojo intenso y llevárnosla a la boca. Pero ¿y qué pasa de noviembre a julio?; ¿nos tenemos que olvidar de ellas?; ¿¡¿sin frambuesas más de ocho meses?!?
Si crees que la respuesta a estas preguntas es SI y que sólo te queda la resignación, es porque no te has pasado por nuestra web, la frambuesa puede estar en tu despensa todo el año.
Vaya por delante que en Petra Mora somos muy de respetar los ciclos de cada producto, somos conscientes de que no hay nada mejor que consumir cada producto “cuando toca”, en temporada, esto es así… pero también nos resistimos a perdernos sabores que nos encantan.
¿Qué porqué es importante esto de respetar el momento? Por un lado porque la naturaleza es más lista que nadie y si ella es la que nos dice cuando debemos consumir cada producto será por algo. Hagámosle caso, disfrutaremos mucho más de todos ellos. Y por otro, porque debemos tomar conciencia de que, si no demandamos productos que estén fuera de temporada, poco a poco contribuiremos entre todos a conseguir a un cultivo más consciente, concienciado y “solidario” con el planeta.
Todos de acuerdo, pero…. si sigues queriendo comer frambuesas como nosotros sin alterar los ciclos… sigue leyendo 😉
¿Qué vas a encontrar en este post?
FRAMBUESA TODO EL AÑO. ¡QUIERO COMER FRAMBUESAS!
Si, lo sabemos, si has llegado hasta este post, es porque quieres frambuesas todo el año, lo tenemos claro, y hasta ahora no te hemos dado una solución a tu antojo frambuesil. Aquí la tienes, dos buenas maneras de saciar tus ganas de comer frambuesas:
FRAMBUESAS LIOFILIZADAS
Mediante este método de conservación, podemos mantener los alimentos durante mucho más tiempo que en fresco, y lo mejor de todo es que conservan todas sus propiedades nutricionales, el sabor, el aroma y el color. Así son y aquí están nuestras frambuesas enteras liofilizadas, listas para añadir fácilmente a tus ensaladas, en un yogur con otras frutas y cereales o para que prepares una salsa bien buena.
CRISPY DE FRAMBUESA
El plan B, o la segunda opción, igual o más interesante que la primera. Pequeños trocitos potenciadores de sabor para que al plato que te apetezca, ya sea dulce o salado, le puedas añadir ese sabor característico de la frambuesa, fresco y aromático. Incluso una pizca en una copa puede darle un toque diferente a tu bebida.
No se trataba de contarte sus bondades y beneficios, sólo de darte alternativas fáciles para que siempre tengas a mano el sabor de la frambuesa. Esperamos haberte ayudado. Hasta la próxima!
